Hay tanta información, métodos, case studies de interés que cuesta seleccionar.

Poco a poco, vamos redibujando otra forma de ver las cosas. Otro acercamiento a aquello que nos rodea. El otro día leía un artículo de Concha Hidalgo Esteban que utilizaba el término ‘La empowerempatía’. Me pareció interesante porque hace tiempo que hablamos de la empatía con ‘el otro’ (colegas, clientes, interlocutores) como forma de trabajar.

Concha Hidalgo resalta que a menudo creemos que la empatía equivale a estar de acuerdo con otra persona, en cambio ella postula que es posible estar en completo desacuerdo con alguien sin por ello dejar de ser empáticos, respetando lo que tiene que decirnos, respetando su posición.

Para mí la empatía es un talento emocional a desarrollar por cada uno de nosotros. Es una cualidad altamente valorada en nuestro día a día, en la que intervienen dos factores fundamentales:

– La escucha. Debo escuchar lo que otra persona me dice, sin hacer una interpretación teñida con mis propios contenidos? ¿Estoy enfocado en lo que realmente me quiere decir?

– La retroalimentación. ¿He comprendido bien todo lo que el otro me ha querido transmitir? ¿Qué se puede hacer para mejorar las cosas? Esta pregunta tiene que ver con abrir posibilidades, más que con ofrecer soluciones.

Si practicamos estas dos habilidades, podremos establecer una relación empática satisfactoria con cualquier persona de nuestro alrededor.

Quisiera añadir, que queremos escuchar y escuchar bien porque la comunicación y las relaciones son bidireccionales, ahora más que nunca. Porque tenemos la oportunidad de escuchar por muchas vías, y como se dice en inglés: ‘so we can get it right!’

.- Eva Lovrics